La principal marca del trasnocho ¡LAS OJERAS!

 

Sí, las ojeras son la principal marca de un trasnocho.  Según el diccionario significan pálido, marchito, agotado, triste, ojerudo.

 

Afectan la piel del contorno de los ojos, la cual es muy fina, tiene muy pocas glándulas sebáceas y se distiende fácilmente.  Estas cualidades no son nada favorables en una zona expuesta al sol en la que hay 33 músculos peri-orbiculares en permanente actividad.

 

Las ojeras son alteraciones de la coloración de la piel debajo de los ojos debido a una producción excesiva de melanina y a dilatación de los capilares próximos a la superficie de la piel. Los capilares pueden presentar disminución de la circulación sanguínea que por lo general producen bolsas. Las bolsas también son causadas por acumulación de grasa y debilitamiento muscular. Existen además múltiples enfermedades de la piel, de los párpados o de la salud del individuo que causan ojeras, o sea que este problema cosmético que se agrava con el trasnocho.

En algunos casos, puede deberse a enfermedades que padece la persona y que no se han detectado. También las ojeras se presentan con el pasar de los años, lo cual es normal en la edad avanzada. La piel pierde grasa subcutánea, fibras de colágeno y elastina, las cuales ayudan en el soporte y elasticidad de la misma. Su deterioro y perdida causan las arrugas.

 

Tratamiento

 

Hay cuidados cosméticos, dermatológicos, truquitos con el maquillaje y secretos caseros.  Antes de indicar un tratamiento es fundamental identificar la causa predominante.

 

Cuidados cosméticos

 

• Limpieza de párpados
• Crema hidratante específica para el contorno de los ojos mañana y noche.
• Tonificación con lociones descongestivas como
• Cremas antirradicales libres: con Vitamina C y Té Verde.
• Fotoprotección.

 

Crema para el contorno de ojos:

 

• Hidratantes
• Despigmentantes
• Antioxidantes y regeneradoras
• Descongestivos
• Filmógenas
• Astringentes
• Formadoras de colágeno
• Ácidos grasos instaurados

 

Maquillaje

 

• Correctores, iluminadores, tapa-ojeras.

 

Con su aplicación se pretende iluminar el surco que hunde el párpado inferior y, además, corregir la diferente coloración que pueda presentar esta zona.

 

Elección del corrector

 

Piel blanca: tono claro

Tez clara y cabello negro: color natural o beige.

Trigueñas y de cara rosada: gama de rosas.

Tez morena: tono beige dorado.

Muy morena: bronce natural.

Rojeces: tono verde.

Piel grasa: corrector en lápiz o en barra.

Piel seca: corrector compacto o cremoso o líquido.

 

Aplicación del corrector:

 

• Limpiar bien la piel.
• Colocar el corrector mediante suaves golpecitos, sin estirar la piel y difuminarlo con una esponja en dirección de afuera hacia adentro.

 

Recordar la zona entre el ángulo interno de los ojos y la nariz, el ángulo externo del ojo.

Algunos maquilladores prefieren aplicarlo antes de la base y otros después.

Para que el corrector se fije y dure por más tiempo, es fundamental aplicar polvo traslúcido en pequeña cantidad.